La realización de la compañía del otro es que nos hace mejores. A veces mejores porque inspira. A veces porque nos da energía. En muchos lugares, abril se ve como el verdadero comienzo del año—estallando con la energía potencial de la primavera.

Nos reunimos para explorar lo que significa estar en la presencia del otro. Cuidar de nuestros cuerpos. Reiniciar nuestros sistemas. Comenzar de nuevo con alegría y ligereza.

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